Con el descenso de la UD Las Palmas, jugadores como McKenna y McBurnie quedan liberados de sus respectivos contratos. Oli, a pesar de que no hay terminado el curso de forma oficial, ya habla de su futuro en el programa Football Heaven de BBC Radio Sheffield. El delantero ha confirmado esa cláusula de libertad tras descenso: "No alcanzamos nuestra meta este año y no logramos mantenernos, así que mi contrato pasó de ser de tres años a ser vencido nuevamente, por lo que soy agente libre".
Una forma de dejarse querer en las islas británicas, un lugar al que ite que quiere volver: "Nos queda un partido contra el Espanyol, y la semana que viene volveré a casa para pasar el verano y pasar un par de semanas con la familia. Es un placer estar aquí, pero a la vez es duro estar tanto tiempo lejos de la familia. Hablaremos y veremos qué queremos hacer". El futuro de McBurnie no tendrá demasiada historia, ya que la UD Las Palmas no se plantea negociar con el ariete de cara a la próxima temporada.
Ocho meses sin ver portería
El elevado salario del jugador, unido a su escasa aportación dentro del terreno de juego, le hacen pasar a la carpeta de descartes. El jugador se ganó el cariño de la afición, pero no demostró dentro del terreno de juego las expectativas que había generado su fichaje. Su primer gol tardó en llegar ocho meses y acabó el curso con solo tres. Unas cifras que reflejan la discreta temporada del ariete.
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