El centrocampista onubense Manu Molina ha puesto este miércoles punto final a su etapa como jugador del Málaga. Visiblemente emocionado y arropado por su familia, el futbolista compareció ante los medios tras conocerse su no continuidad en la plantilla blanquiazul. Dos temporadas después de su llegada, Molina se marcha agradecido, con la cabeza alta y dejando un mensaje claro: “Creo que he dado un nivel muy bueno para seguir”.
Durante su intervención, el jugador no quiso dejar a nadie sin mencionar. “Han sido dos años maravillosos. A nivel deportivo, espectacular. He disfrutado muchísimo defendiendo este escudo”, expresó entre agradecimientos. Recordó con especial cariño el ascenso logrado el pasado 22 de junio en Tarragona, un momento que, según sus propias palabras, “nunca se me olvidará como a todos los malaguistas”. También quiso remarcar cómo el club le devolvió la ilusión tras una etapa gris en Zaragoza: “He disfrutado como un niño”.
En el Málaga han sido dos años maravillosos. A nivel deportivo, espectacular. He disfrutado muchísimo defendiendo este escudo
Molina tuvo palabras muy sentidas para la afición malaguista. “Ha sido un orgullo defender esta camiseta. Desde el primer momento sentí su cariño. Salí ovacionado de La Rosaleda y eso se queda para toda la vida. Gracias a ellos fui mejor futbolista”, dijo, visiblemente emocionado. Reconoció que se marcha dejando amigos y sintiéndose “un malaguista más”.
Ha sido un orgullo defender esta camiseta. Desde el primer momento sentí su cariño. Salí ovacionado de La Rosaleda y eso se queda para toda la vida. Gracias a ellos fui mejor futbolista
A la hora de hacer balance, Manu se mostró satisfecho con su trayectoria. “Vine con un objetivo y lo cumplí. Luego vino otro, y también lo logramos. Me voy con la cabeza alta y los pies por delante”. También valoró la intensidad con la que ha vivido esta etapa: “Pareciera que hubiera estado aquí una eternidad, pero solo han sido dos años. Este club se vive con el alma. Estoy muy orgulloso de haber pasado por aquí”.
Conciencia tranquila
Sobre su salida, itió que la falta de noticias por parte del club le generó inquietud. “Estaba tranquilo por mi nivel deportivo, pero cuando pasaban los meses y no me comunicaban nada, me entraba ese gusanito. El día que me lo confirmaron lo pasé muy mal. Tengo una hija de nueve años que se ha hecho a esta ciudad, y eso me dolía”, explicó. Aun así, evitó reproches: “El club apuesta por gente joven y no tengo nada que achacar. Me voy con la conciencia tranquila. Mi rendimiento está ahí”.
Respecto al futuro, se mostró prudente y abierto a nuevos retos. “Estoy desconectado, no quiero que me llame mi agente hasta que no haya una oferta seria. Ojalá seguir en Segunda y volver a jugar en La Rosaleda. Siempre quise vestir solo esta camiseta, pero el fútbol es así”.
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